Seg??n fuentes de organizaciones defensoras de los derechos humanos, el lucrativo negocio es uno de los delitos controlados por los c??rteles de la droga y maras centroamericanas, quienes piden rescate por sus v??ctimas y los ejecutan si no son complacidas sus demandas.??Desde el 2006 hasta la fecha, las denuncias en cinco estados mexicanos por secuestros extorsivos aumentaron en forma sostenida, pese a las amenazas de muerte contra quienes las realizan.
Fuentes militares declararon que la mayor??a de las v??ctimas tienen entre 16 y 35 a??os, y muchos secuestros son para reclutar sicarios, bajo las amenazas de da??ar a sus familiares.
A pesar de la informaci??n oficial, la Comisi??n de Derechos Humanos de M??xico, sostuvo recientemente que desde septiembre de 2008 a marzo de 2009 fueron secuestrados 20 mil inmigrantes, a muchos de los cuales le exigieron entre 3.500 y 5.000 d??lares por su libertad.
Recientemente, el sacerdote de Ixtepec, Alejandro Solalinde Guerra, denunci?? que Oaxaca resulta hoy la capital mexicana del secuestro de emigrantes centro y sudamericanos, delito controlado por maras de la M13, Los Zetas y la delincuencia regional.
El caso m??s estremecedor ocurri?? en el rancho San Fernando, en Tamaulipas, donde el 24 de agosto de 2010 fueron asesinados 72 extranjeros, en su mayor??a centroamericanos que iban rumbo a Estados Unidos, presuntamente porque se negaron a unirse a las filas del crimen organizado.