Se debe a que el cuerpo calcinado en un auto de Balvanera era de la mujer desaparecida Graciela Inés Torrilla. En cámaras de seguridad se la puede ver conversando con el detenido Iván Medici, sospechoso por el homicidio.
La Policía de la Ciudad identificó por un análisis de ADN el cadáver calcinado dentro de un auto el pasado 11 de octubre en Balvanera. El mismo pertenece a Graciela Inés Torrilla, una mujer de 41 años que estaba desaparecida desde el día anterior al sospechoso incendio.
Mientras, Iván David Medici, confesó haber prendido fuego el Chevrolet Aveo de su madre porque adujo estar cansado de que lo vandalizaran, aunque negó saber que había dentro una persona.
Hasta el momento permanece detenido por homicidio. Y está muy comnplicado dado que apareció un video de una cámara de seguridad donde se lo ve hablando con la víctima fatal.
Fuentes policiales indicaron que «del análisis de las filmaciones de la zona del Centro de Monitoreo Urbano (CMU) y de los videos aportados por la División Homicidios, se observó a la persona buscada que estaba acompañada por un hombre, en cercanías al vehículo que fue incendiado».
El día que desapareció, la mujer se fue de su casa en Bartolomé Mitre al 4000, donde vivía con sus padres y sus dos hijos de 14 y 17 años, sin decirles a dónde se dirigía. Nunca más regresó.
Tras la aparición del cuerpo calcinado, la jueza interviniente Karina Zucconi dispuso un análisis de ADN éste y el joven que había denunciado la desaparición de su hermana. El resultado fue positivo y no dejó dudas: el cuerpo era de Graciela Inés Torrilla.
El joven detenido vivía a la vuelta del lugar donde estaba estacionado su auto y allí lo detuvieron, en un departamento de la calle Hipólito Yrigoyen 3221.